No todo tienen que ser malas noticias, afortunadamente, y aunque se produzcan en agosto por lo que pasen un tanto desapercibidas, no tienen porqué no ser celebradas. El Gobierno Central y el Consell acuerdan invertir dos millones de euros en bibliotecas valencianas, algo de lo que debemos congratularnos teniendo en cuenta del poco alagüeño informe del Consell Valencià de Cultura sobre la situación de las bibliotecas públicas en la Comunitat Valenciana.
Ahora sólo esperemos que esta noticia no se convierta en una serpiente de verano y que estos fondos no se destinen a otros lugares para cuadrar las cuentas de las administraciones públicas al final del corriente ejercicio. Es decir, que las inversiones se ejecuten realmente.
Por las bibliotecas del norte de la Comunidad aún no se sabe nada del tema.