Desde que abandonamos el proyecto de el portal de «El Documentalista Enredado», he notado que he ido perdiendo Tensión Informativa. Es decir, anteriormente, debido a la necesidad de actualización continua de contenidos del portal que nos llevábamos entre manos, sentía la necesidad de intentar abarcar el mayor número de fuentes de información posibles que se encontrasen en Internet. Para ello, tuvimos que desplegar una serie de estrategias informativas con mayor y menor éxito, por supuesto que el procedimiento de visitar cada semana o cada día las páginas web que nos podían llegar a interesar estaba claramente descartada salvo en casos puntuales.
La primera de estas estrategias informativas consistía en las, ya denostadas por algunos, newsletters. Este procedimiento es muy sencillo, descubres o conoces una web que te interesa y ésta mediante un servicio de alerta semanal o mensual te envía información sobre los nuevos artículos publicados. Esta herramienta es muy útil siempre que estés suscrito a pocas y que hayas sido realmente selectivo, porque todos sabemos lo sobrecargado que tenemos los buzones de correo para tener que recibir ingentes cantidades de estas newsletters. Otro problema añadido para este sistema de alerta es que el servidor puede considerarlo como spam, con lo que algunas se perderán irremediablemente.