Nicholas Carr suponía que las nuevas tecnologías, no sólo Internet o la Web, nos estaba haciendo vagos. Al introducir los textos a través de los móviles, antes con los SMS y ahora con las distintas aplicaciones de mensajería y de Redes Sociales de los smartphones, hacemos trizas la gramática y la ortografía fruto de años de estudio metódico y que ahora muchos descubrimos que nos cuesta controlar. Nos encontramos perdiendo la capacidad de expresarnos a través de la escritura, porque intentar expresar una idea a través de 140 caracteres obviamente no ayuda a desarrollarla, sólo a bramar por ella, pero la tecnología también merma otras capacidades como la capacidad de retención lectora.
Leer un documento en un iPad disminuye nuestra capacidad de retención sobre lo que leemos en un 20%. Lo más curioso es que los patrones de comportamiento son similares en papel que ante el dispositivo electrónico, o sea, que en el iPad no existe la lectura en diagonal que solemos utilizar cuando leemos en una pantalla. Y es que ante un ordenador acudimos a los párrafos donde la información nos más impacta más o nos parece más relevante, en un intento de subrayado digital, que nos priva del desarrollo de las ideas que se encuentran en el texto mismo.
Finalmente, otro de los aspectos que nos limitan en el mundo tecnológico es el comportamiento que tenemos a la hora de consumir información en la Web. Además de considerar a Google nuestra memoria, el lugar donde encontraremos aquel documento o idea que tanto nos gustó y que por lo tanto no tenemos necesidad de guardarla ya sea en nuestro propio ordenador o en uno de esos sitios para almacenar enlaces; muchos de nosotros tenemos una visión cerrada de lo que es la Web y de las posibilidades. La opción de encontrar en la Red personas que tienen los mismos gustos que nosotros o que piensan como nosotros, nos cierran la opción de descubrir y de argüir con otras personas que piensan justo lo contrario. En este caso, perdemos la riqueza del intercambio de ideas que son para nosotros disonantes, pero que enriquecen nuestros puntos de vista.
Por supuesto que a la forma en la que consumimos información le sucede lo mismo. Según avanza la posibilidad de que dispongamos perfiles dentro de los sitios web informativos, que sepan qué información nos gusta y nos interesa sobremanera, va en detrimento de que sepamos qué es lo importante. Antes cuando querías estar informado y adquirías un periódico, lo ojeabas y un periodista, o varios, dependiendo de la importancia de la pieza informativa disponía de cierto espacio y de colocación para la misma. Actualmente, consumimos sólo la información que nos interesa, vamos al quite, casi obviando y maltratando el resto, convirtiéndose Internet justo en lo contrario de lo que nosotros pensábamos, en un embudo. Un embudo que sólo nos ofrece información que nos interesa que no es necesariamente la importante, que se centra en satisfacernos más que en informarnos, empobreciéndonos intelectualmente en la mayoría de las ocasiones, haciéndonos un poco más tontos.
Discrepo profundamente. El problema no es Internet, sino el usuario. No nos volvemos tontos por usar Internet. El que es tonto, lo era ya antes. Dejemos de culpar a las cosas de nuestros fallos. En Internet, todo el mundo es libre de buscar nuevas fuentes de información, incluso de navegar sin perfil, de forma anónima, para evitar estos filtrados que comentas. Los medios tradicionales, radio, prensa y TV, siempre han llevado «de serie» un filtro ideológico, o sea que esto que se dice de acceso sesgado y parcial a la información no es nuevo. Y lo de tener amigos que piensen como nosotros, aún menos.
Lo radicalmente distinto con Internet es que las posibilidades son infinitas. Sí, es cierto que hay que darle al «On» al cerebro antes de utilizarla, saber lo que uno quiere encontrar y hacer un cierto esfuerzo por buscarlo. Pero, ¿seguro que es Internet lo que nos hace más tontos? No sé, yo me inclino más por el sistema educativo, años de telebasura y, como decía Fromm hace décadas, mucho miedo a la libertad…
Los titulares rotundos tienden a generar polémica, sin embargo no somos más tontos por utilizar internet, obviamente. Disponemos de más fuentes de información a las que acudir ante una necesidad informativa, podemos intercambiar ideas, etc. Sin embargo, el texto más allá de los cambios que sufrimos a la hora de lidiar con las tecnologías y que estamos descubriendo, lo que trata de señalar es la falta de profundidad que se pierde en ella.
Obviamente, los medios de comunicación están sesgados ideológicamente, pero yo no hablo en este caso de ideologías. El filtrado de la información que hacen nuestros amigos es, por proximidad, el mismo que haríamos nosotros mismos, las noticias que se comparten en estos fueros en el Social Media son similares a las que nosotros difundiríamos por nosotros mismos.
No, no se trata de ideologías sino de abrir el campo. De todas maneras, aún es pronto para poder sacar conclusiones. Puede que como decía Nicholas Carr yo me considere más tonto, aunque posiblemente se trate de que no sé utilizar bien la tecnología.
😉
Gracias por el comentario!!!
totalmente de acuerdo, y sobretodo en lo de miedo a la libertad
Tampoco estoy de acuerdo.
Primero porque me parece una afirmación gratuita. Más tontos… respecto a que ?
Es decir menos sabios… o menos inteligentes..
La inteligencia depende de otras variables como la alimentación y la genética… y el ser sabios depende de la educación… nunca en la historia de la humanidad ha habido tanto gente con formación ni estudios… hoy en el mundo se hacen cosas inimaginables hace 40 años … así que de tontos nada.
A partir de aqui suponer que Internet nos da lo que quiere y no lo importante es… entre otras cosas muy egolatra ya que lo importante para ti no lo es para mi… hoy en dia mi lector de feeds carga 200 feeds de temas que me importan … No solamente que me interesa …y llegar a la conclusión que un ‘periodista’ sabe mejor lo que necesito que yo mismo es de una soberbia supina.
Tenemos necesidad de aprender reyes godos… rios… de españa…? Porque no los de egipto… Lo que nos alcanza Intenet es esa información higienica al alcance de la mano.
Si te pregunta por la calle cual es la capital de Bielorusia … acaso importa… La tienes en la palma de la mano en un movil y dentro de poco en las gafas o en el oído interno… que mas como se consigue la informació mientra sea rapida y eficiente.. Falta bucear mas que surfear.. seguramente… pero sobre lo que nos importa todo el mundo bucea … para lo de mas surfeamos…
Perdón por las faltas… escribo desde un impresentable teléfono… y se me han escapado letras, acentos, … espacios entre palabras…
Recuerdo perfectamente un artículo publicado ya hace unos años que se interrogaba ¿por qué somos estúpidos? En la revista, se ilustraba un ejemplo como cuando habíamos intentado estirar el depósito de gasolina y simplemente nos habíamos quedado sin ella. En mi caso, el no revisar el aceite cuando tocaba, aunque lo sabía, iluminó el piloto rojo de advertencia.
No se trata de ser estúpido, sino de hacer cosas estúpidas. No se trata de tener al alcance de la mano información, sino de tener sustrato, saber digerirla e interpretarla. Ése es el gran error. Sin una cultura base, no es posible entender el mundo en el que vivimos. Necesitamos el tamiz. Obviamente, conocer todos los reyes godos por su nombre es ridículo.
Mi intención en el artículo es intentar evitar el embudo. Por supuesto que entiendo que los medios de comunicación tengan el prestigio que disponen actualmente, pero hay que escucharles y leerles para saber que en muchas ocasiones ellos «tocan de oído». Que no saben ni entienden nada de lo que pasa y que su opinión puede llegar a tener la nuestra propia. Su desprecio como fuente es un completo error puesto que muchas de las informaciones que compartimos provienen de ellos mismos.
Como decía anteriormente, estamos sumergidos en un proceso de cambio. Las nuevas formas de comunicación y de documentación están cambiando muchas de las instituciones que nosotros considerábamos establecidas. El texto anterior simplemente trata de trasladar ese hecho. No soy un neoludita, ni mucho menos.
Respecto al miedo a Internet, yo no estaría tan seguro. Algunos ya le están cogiendo el gusto. Sólo la fortaleza de una sociedad puede hacer frente a sus políticos y sus comportamientos en ocasiones poco éticos y la Web simplemente es una de las correas de transmisión.
Gracias por el comentario Mon!
Un off-topic:http://www.lasprovincias.es/v/20110626/comunitat/arrepiento-carrera-elegi-20110626.html
¿Qué os parece esto?
Ummm, yo sabiendo lo que sé y cómo está el panorama tampoco la estudiaría atendiendo a criterios meramente laborales. Recibo muchos correos de estudiantes y mi consejo siempre es estudia lo que te guste y luego la vida ya te irá poniendo donde quiera.
That’s the perfcet insight in a thread like this.